España: El plan de vías 'marginará' a la estación de trenes frente a la de autobuses, dice UGT

El sindicato lamenta que el Consorcio de Transportes 'muestre con Alsa una sensibilidad que no palpamos con el ferrocarril cuando se cerró El Humedal'.

Los últimos movimientos efectuados en relación al plan especial de las vías y la estación de autobuses de Alsa ha puesto a los trabajadores ferroviarios en estado de alerta. Temen que las administraciones competentes "acaben dando distintas soluciones" al ferrocarril y al transporte de viajeros por carretera, cuando lo comprometido era agrupar a trenes y autocares en una gran estación intermodal. "Cada paso que dan, confirma nuestros temores", manifestaban representantes del sindicato UGT.

Según su retrato de la situación, la solución prevista para el ferrocarril pasaría por mantener por tiempo indefinido la provisionalidad de la estación construida en la calle de Sanz Crespo. En cuanto a las líneas del grupo Alsa, "sospechamos que se les buscará una solución sin que pierdan la centralidad". En ese caso, "al ferrocarril se nos engañó" cuando la sociedad "Gijón al norte", encargada de gestionar el plan de las vías, cerró las estaciones de El Humedal y Jovellanos, trasladando el tráfico ferroviario a Sanz Crespo.

De ese cierre han pasado ya más de dos años y, según datos de UGT, "con el cambio hemos perdido un 30 por ciento de usuarios, más de 200.000 viajeros". La nueva estación de Sanz Crespo se encuentra a casi un kilómetro de distancia de El Humedal y, por ende, del centro urbano. La infraestructura se creó como medida provisional, para garantizar el flujo ferroviario mientras durasen las obras del plan de vías. "Hoy lo dudamos más que nunca", puso en cuestión Luis Blanco, presidente del comité de empresa de Renfe Operadora-Ancho Métrico.

El plan de vías ha experimentado notables variaciones y, por razones económicas, se ha decidido acometer el proyecto por fases. La primera no incluye la estación intermodal, que queda postergada debido a su complejidad técnica y, sobre todo, a su elevado coste. Lo que se hará a corto y medio plazo es urbanizar el terreno comprendido entre el Museo del Ferrocarril y El Humedal, además de conectar la estación de Sanz Crespo con el túnel del metrotrén para que los Cercanías puedan llegar, al menos, hasta la parada prevista en la plaza de Europa.

A los representantes de los trabajadores les huele a solución definitiva, por eso ayer aprovechaban el Día de Acción de los Ferroviarios Europeos para reividicar que "se cumpla el plan según lo anunciado" en su día. Que esté en proceso de tramitación un proyecto urbanístico que transforma la estación de Alsa en una manzana residencial de 52 viviendas acentúa su inquietud. Especialmente, después de que el Consorcio de Transportes de Asturias interviniese en el asunto, sugiriendo al Ayuntamiento la necesidad de buscar una alternativa a la terminal de la calle Llanes antes de autorizar su cambio de uso.

Al tratarse de unas instalaciones privadas, Alsa no tiene obligación legal de ponerlas al servicio de la ciudad como ha venido haciendo durante décadas. Y mucho menos ahora que los andenes de su estación tienen la calificación de suelo residencial. Por lo pronto, el gobierno local ha parado el expediente. "El Consorcio muestra una sensibilidad con la estación de autobuses que no palpamos con la nuestra", dejó caer Luis Blanco, que ayer comparecía junto a Jorge Luis Fernández, presidente del comité de Adif-Ancho Métrico, y Juan José de la Blanca, secretario del sector ferroviario de UGT. Lo hacían en El Humedal, como lugar representantivo de la situación del ferrocarril en la región. "Estamos siendo marginados", lamentaron.

Anunciaron, como problema añadido al hecho de que "se pretenda instaurar, a partir de 2019, un modelo de liberalización".