España: Un choque de trenes de Renfe en el túnel de lavado costó 11,9 millones de euros

La memoria de Renfe Viajeros desvela el siniestro, que tuvo lugar el año pasado.


Un AVE de la Serie 103 de Siemens.

Dos trenes de alta velocidad de Renfe chocaron el pasado otoño en el túnel de lavado de los talleres de mantenimiento situados entre Cerro Negro y Santa Catalina, en las cercanías de Madrid. El suceso, que no ha trascendido públicamente hasta el momento, no se cobró afortunadamente ninguna víctima pero ha supuesto para el operador público quedarse sin poder operar dos AVE de la Serie 103, fabricados por Siemens.

Según reconoce Renfe en la última memoria económica publicada de Renfe Viajeros, una de las cuatro filiales en las que se ha divido el gigante ferroviario, en el capítulo de amortizaciones y retiros de inmovilizado se reconoce "el accidente de dos trenes de la serie 103 en el Taller de Santa Catalina", lo que supuso una pérdida por valor de 11,9 millones de euros.

Un portavoz oficial de Renfe consultado por elEconomista reconoce el percance, que ocurrió mientras que un AVE S-103 estaba estacionado sin conductor en el túnel de lavado en espera de comenzar labores técnicas de comprobación, cuando otro tren del mismo modelo (que, lógicamente, si llevaba maquinista) le alcanzó.

El accidente se produjo a baja velocidad y no se cobró ninguna víctima, ni herido de gravedad, pero ha obligado a Renfe a exigir responsabilidades para poder cobrar el valor de los dos trenes y los desperfectos que se produjeron en las instalaciones, ya que el primer tren hizo efecto acordeón, lo que afectó a las paredes del túnel de lavado.

Tras la investigación interna de la Dirección General de Ferrocarriles se llegó a la conclusión de que fue un error humano (reconocido desde el primer momento) del personal encargado de controlar la circulación en el taller, que no desvió el tren a la vía correcta. La empresa encargada de estas instalaciones es Nertus (una compañía de mantenimiento participada por Siemens en un 51 por ciento y por Renfe, en un 49 por ciento), que a su vez tenía subcontratado este servicio.


Al menos un tren inservible

Renfe ha logrado que la aseguradora Zurich se haga responsable del siniestro y le devuelva los 11,9 millones de euros a los que hace referencia la memoria económica de Renfe Viajeros. Desde la compañía se cree que una parte de este material es irrecuperable, aunque estiman que de los dos trenes afectados se podría crear un nuevo AVE aprovechando los vagones menos dañados.

Este percance en la flota de los trenes AVE de Renfe se suma al desgraciado accidente del tren de la Serie 730, fabricado por Talgo, en las cercanías de Santiago de Compostela ocurrido el pasado verano. En ese caso, el convoy quedó totalmente destrozado (sigue paralizado por las autoridades mientras que continúa la investigación) y no se ha podido recuperar su valor, estimado en 8,6 millones de euros, según la memoria económica.

Renfe, al igual que otros grandes operadores europeos de ferrocarril como el francés SNCF o el alemán DB, no tiene un seguro específico de accidentes de su flota de trenes porque al ser muy amplía sería demasiado caro contratarlo, ya que tiene más de 1.500 trenes de todo tipo (AVE, Cercanías, Media Distancia, Larga Distancia y Mercancías) y le compensa económicamente asumir el coste del material cuando ocurre un siniestro de estas características. Sí que tiene contratados seguros para catástrofes naturales como, por ejemplo, un terremoto. En ese caso, estaría cubierto cualquier percance.

El siniestro no ha sido investigado por la Comisión de Investigación de Accidentes Ferroviarias (CIAF) porque, según las mismas fuentes, se produjo dentro de unas instalaciones privadas, no fue de gran gravedad y no afectó a la red de ferrocarril.


Fuente: El Economista - España